Periodista y editora internacional.
Tres anillos de seguridad, inhibidores de drones, francotiradores y cerca de 7000 efectivos policiales ya se han desplegado a esta hora en el microcentro de Buenos Aires con el objetivo de proteger los distintos puntos de la ciudad en que se desarrollará -a partir de las 12.30 horas- la asunción del nuevo presidente de Argentina, Javier Milei.
La jornada iniciará en el Congreso de la Nación, lugar que congregará a las principales autoridades argentinas y extranjeras invitadas al cambio de mando.
Entre los asistentes estarán el presidente de Chile, Gabriel Boric, acompañado de tres de sus ministros: Relaciones Exteriores, Alberto van Klaveren, quien se reunirá durante esta jornada con la nueva canciller Diana Mondino; Álvaro Elizalde (Secretaría General de la Presidencia) y Antonia Orellana (Mujer y Equidad de Género); y los presidentes Luis Lacalle Pou (Uruguay), Santiago Peña (Paraguay), Viktor Orban (Hungría), Daniel Noboa (Ecuador), Rey Felipe de España y Volodimir Zelenski (Ucrania).
Tanto el mandatario de Colombia, Gustavo Petro; de El Salvador, Nayib Bukele; y de Brasil, Lula da Silva, se excusaron se asistir, pero confirmaron el envío de comitivas oficiales.
En primer lugar, asumirá la vicepresidente de la República Argentina, Victoria Villarruel, como presidenta del Senado, quien tendrá además la gran responsabilidad de -junto al Ministro Guillermo Francos- administrar los apoyos legislativos para aprobar paquete de medidas de los primeros 100 días y en un parlamento en que ninguno de los partidos políticos tiene mayoría.
¿De espaldas al Congreso?
Luego, será el turno de Javier Milei, quien dejará de ser el presidente electo para convertirse oficialmente en Presidente de la República Argentina y que, por primera vez en más de 170 años, el discurso del juramento lo dirigirá a los ciudadanos ubicados en la explanada de la Plaza del Congreso, Plaza Mariano Moreno y Plaza Lorea, frente a la sede parlamentaria, y no hacia quienes les representantan en la Asamblea Legislativa, enviando un claro mensaje acerca de los drásticos cambios de la nueva Era Milei.
