Periodista
Luego de comenzado el proceso de vacunación en el país, el cual ha priorizado a adultos mayores y personal de salud, según informa el Gobierno, se han superado los 2 millones y medio de personas vacunadas con dosis de Pfizer o Sinovac. No obstante, existe un grupo que no ha sido inoculado: Embarazadas, quienes, además, no contarán con postnatal de emergencia en caso de que su hijo (a) nazca luego del 13 de marzo de 2021.
Debido a la emergencia sanitaria provocada por el SARS-CoV-2, miles de madres, padres y cuidadores/as presionaron a las autoridades para aprobar una licencia médica preventiva parental, más conocida como postnatal de emergencia. La misma se prolongó por cierto tiempo y, lamentablemente, se extenderá sólo hasta el 13 de marzo. Esto, a pesar de que, según informó el presidente Sebastián Piñera, el estado de excepción en el país se prolongará hasta al menos mayo de 2021.
La extensión de la licencia parental en muchos casos ya ha caducado -a diciembre de 2020 eran cerca de 27 mil personas-, y debido a la incertidumbre respecto a la apertura de salas cunas y el riesgo de contagiarse al movilizarse hacia el trabajo o estando en el mismo, algunas madres y padres tienen como única opción renunciar para cuidar a sus hijos (as) o recurrir a la utilización del seguro de garantía dentro de la Ley de Protección al Empleo.
Esta preocupación no sólo circula en la ciudadanía, sino que un grupo de parlamentarios, entre los que se encuentran las diputadas Gael Yeomans y Maite Orsini y el diputado Marcelo Díaz, quienes hicieron un llamado a las autoridades a extender el postnatal de emergencia a mediados de diciembre pasado. Hoy, cerca de terminar el mes de febrero, la necesidad continúa más latente que nunca y las soluciones aún siguen esperando.
“Necesitamos una política pública global que propicie el cuidado y se encuentre acorde a la coyuntura actual. Esto implica proteger a la gestante (tanto con vacunas si es su deseo, como con leyes de protección laboral concretas y factibles) y, además, que no se tenga que llegar a la decisión entre renunciar al trabajo por cuidar a los hijos, o mantener el trabajo a costa de una incertidumbre angustiante. Estamos frente a una pandemia que nos tiene en emergencia sanitaria, y los niños también sufren sus consecuencias. Hoy más que nunca, proteger a la madre o padre, es abogar por la infancia primero”, expresa la doctora Andrea Von Hoveling.
Embarazo y vacunas
A principios de febrero, luego de establecer anteriormente que personas en período de lactancia y embarazadas no serían vacunadas contra el Covid-19, el Ministro de Salud, Enrique Paris, informó que un equipo de expertos (as) determinó la seguridad de, eventualmente, vacunar al primer grupo.
Respecto a las personas embarazadas, se estableció que, al no existir estudios concluyentes sobre la inoculación en ellas, y, debido a que estudiarán la literatura existente en otros países, por el momento, no serán vacunadas. Es importante mencionar que, dichas razones recaen en la falta de estudios, no debido a la observación de efectos adversos.
En tanto, algunos grupos cuestionan la decisión debido a que, por ejemplo, algunos componentes de la vacuna Sinovac son similares a los que contiene la vacuna de la Influenza, la cual sí es se aplica en personas embarazadas.
Sin ir más lejos, a mediados de febrero, científicos (as) de la Universidad Atlántica de Florida, en Estados Unidos, detectaron anticuerpos contra Covid-19 en la sangre del cordón umbilical de una recién nacida. Esto debido a que su madre, trabajadora esencial de salud, se vacunó contra el virus a las 36 semanas de embarazo, aunque, en este caso, con la vacuna Moderna. Según Paul Gilbert y Chad Rudnick, investigadores que detectaron esta situación, los anticuerpos presentes en la recién nacida sugieren que “existe una potencial protección y reducción del riesgo de infección” debido a dicha inoculación”.
Por su parte, la postura de la Organización Mundial de la Salud -OMS- ha sido ambivalente. Si bien, en un principio no instaban a que embarazadas se vacunasen, a la fecha la institución ha publicado dos guías sobre las vacunas de Moderna y Pfizer- BioNTech. En la referente a Pfizer-BioNTech, se establece que, quienes experimentan un embarazo presentan “mayor riesgo de sufrir Covid-19 severo” asociándose también a más posibilidad de vivir un parto prematuro. De igual modo, la OMS sugiere que, “en caso de que una mujer embarazada tenga un riesgo inevitable alto de exposición (por ejemplo, una trabajadora de la salud), se puede considerar la vacunación en consulta con su proveedor de atención médica”.
Según la doctora Andrea Von Hoveling, Directora de la Sociedad Chilena de Endocrinología Ginecológica (SOCHEG), Miembro de la Sociedad de Obstetricia y Ginecología (SOCHOG) y Sociedad de Ginecología, y delegada en Chile para el Consejo Iberoamericano de Salud Reproductiva y Sexual, “es fundamental revisar los datos existentes con rapidez, puesto que mujeres embarazadas, incluso muchas presentes en la primera línea de salud frente a esta pandemia no pueden esperar”.
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