El hecho ocurrió en noviembre de 2019 en el contexto de manifestaciones por la crisis social en San Bernardo, en las cuales la víctima no estaba participando al momento de sufrir el ataque. La sede de la Región Metropolitana del INDH actúa como querellante.
En su veredicto el tribunal señaló que el autor del disparo actuó de “una manera abusiva y extralimitada, con plena libertad y pudiendo anticipar los resultados dañosos para la integridad de las personas contra quien dirigía el disparo”.
En una decisión unánime el Tribunal Oral en lo Penal (TOP) de San Bernardo declaró culpable del delito de apremios ilegítimos con resultado de lesiones graves gravísimas al ex capitán de Carabineros P.J.M.O., culpable de dispararle una lacrimógena a Fabiola Campillai Rojas, que le causó la ceguera total y la pérdida del gusto y olfato a la actual senadora.
Ella fue herida el 26 de noviembre de 2019 en el contexto de las manifestaciones por la crisis social que se realizaban en la comuna de San Bernardo, mientras esperaba el transporte que la llevaría a su trabajo. A causa del impacto tuvieron que hacerle diversas operaciones para reconstruir su rostro. Hay que recordar que cuando cayó al piso por el ataque estaba en compañía de su hermana, quien al darse cuenta de lo que había pasado se acercó a los carabineros, los cuales respondieron lanzándole una granada de humo para que se alejara.
Tras conocer los hechos, la sede de la Región Metropolitana del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) presentó una querella en contra de quienes resultaran responsables de las lesiones de Campillai. La sentencia será dada a conocer por el tribunal el próximo lunes 10 de octubre.
INDH valora fallo
El veredicto de los magistrados Héber Rocco, Pamela Campos y Marcela Nilo establece que P.J.M.O. “se valió de un arma de fuego, una carabina lanza gases, teniendo el conocimiento, formación técnica e instrucción para manipularla, contando con el pleno control de esta arma y los aspectos que conllevaba su uso indebido. Esto es, disparando directamente a un reducido grupo (…) en un ángulo muy inferior al exigido por los reglamentos y protocolos internos de la institución y contrario a lo recomendado por el fabricante de la munición”.
El fallo señala, además, que “sin previo aviso, advertencia ni gradualidad alguna, el agente con su actuar expuso a la víctima a sufrir en dicho acto graves lesiones y consecuencias físicas, funcionales y psicológicas, destruyendo su proyecto de vida y afectando enormemente su entorno familiar”.
Conocido el fallo, la directora (s) del INDH, Consuelo Contreras, señaló que “el INDH valora el fallo unánime de la justicia. La dureza de la situación que enfrentó Fabiola Campillai se agudiza puesto que fue herida cuando se dirigía a su trabajo y no constituía ninguna amenaza para el perpetrador del ataque. Ella perdió, al igual que Gustavo Gatica, la visión de ambos ojos, y no solo eso, su gusto y olfato, afectando todo gravemente su proyecto de vida”.
Contreras añadió que “este veredicto valida la argumentación que expuso en el juicio oral la sede de la Región Metropolitana del Instituto. Después de casi tres años y pese a múltiples dificultades, se empieza a hacer justicia en uno de los hechos más violentos y emblemáticos ocurridos durante la crisis social de 2019, junto al caso de Gustavo Gatica”.
