Periodista.
Hay varias lecciones que dejan dos situaciones del escenario político reciente. Una, los resultados de la primaria convencional realizada por una parte de la oposición. Dos, la explosión en cadena de la carrera presidencial en la derecha, que provocó la salida del gobierno del ex ministro Mario Desbordes.
Todo esto, mientras en el mundo se anuncian récords de casos diarios de Covid, como en Estados Unidos. En Inglaterra y los países Bajos se detectó una nueva mutación del Covid, mucho más contagioso, pero no más letal y que tiene al Reino Unido descontrolado: y en Chile, con cifras alarmantes de la pandemia y con calles y tiendas abarrotadas como si la cercanía del fin de año significara que se acaba el mundo.
En Europa hay países que ya entraron en cuarentena estricta y sus gobiernos preparan la ayuda económica necesaria para que sus habitantes, en su inmensa mayoría, se queden en sus casas. Distinto a lo que ocurre en Chile, donde se está a la espera de la llegada de la llamada segunda ola de la pandemia. El alza que se está observando en estos días, corresponde a la primera, que nunca ha bajado del todo y, por tanto, de acuerdo a lo que la historia reciente enseña, se podría estar ad portas de días muy duros para la economía del hogar de los más vulnerables y de la empobrecida clase media.
Habrá que ver cómo reacciona el gobierno, que si bien ha sido eficiente en la programación para que la ciudadanía acceda a las vacunas que podrían salvar al país del flagelo el próximo año, ha sido todo lo contrario en lo que a ayudas se refiere: tarde, a gotas y de dudosa universalidad.
Es en este escenario que el Tribunal Constitucional entregó el veredicto sobre el requerimiento del gobierno contra el segundo retiro de las AFP que la Cámara de Diputados aprobó. Justo cuando quienes pidieron ese dinero, que es propio, lo están recibiendo.
Para nadie es un misterio que si el gobierno acudió al TC es porque su as bajo la manga es la presidenta de la entidad, su ex jefa de gabinete María Luisa Brahm, quien, en caso de empate, como ya sucedió, dirimirá obviamente a favor de La Moneda.
Lo impensable es otra derrota de La Moneda. Ahí sí sería el fin del gobierno. Pero, finalmente en el palacio respiraron un poco más tranquilos. El Tribunal Constitucional acogió el requerimiento presentado por el Gobierno y declaró inconstitucional la iniciativa parlamentaria que permitía el segundo retiro del 10 por ciento de los fondos de pensiones. Cinco integrantes de la instancia apoyaron el recurso del Ejecutivo, mientras que otros cinco votaron en contra. Y tal como ocurrió antes, el voto dirimente correspondió a la presidenta del TC, María Luisa Brahm, quien entregó su apoyo a su ex jefe, y quien la nombró en el cargo.
Será, sin duda, un gran tema para la Constituyente.
Primaria con lecciones
Mientras en la Democracia Cristiana trataban de aminorar la algarabía por los resultados obtenidos en la primaria convencional realizada el pasado domingo, donde sin duda fue la gran ganadora, en los otros partidos miembros de Unidad Constituyente, pacto integrado por el PS, el PPD, el PR, la DC, el PRO, hubo caras largas y sorprendidas.
Por segunda vez -aunque la muestra es ínfima- la DC aparecía como triunfadora: en primarias para gobernadores el pasado 29 de noviembre, oportunidad en que el partido liderado por Fuad Chahín ganó en siete de las quince regiones en las que participaron. Y ahora, en las mismas primarias. Datos que son como para observar, por cuanto desde hace años que esa colectividad venía bajando en adhesión. Aparentemente, hasta ahora.
En tiempos en que quienes participan en procesos electorales han sido y son una minoría, se esperaba que en estas primarias no habría -con suerte- 50 mil votos. Incluso menos. Sin embargo, fue bastante más que eso, una cifra cercana a los 80 mil votos. De hecho, Álvaro Elizalde, presidente del PS, después de finalizado el proceso comentó: “La participación ha sido superior a la esperada. Es imprescindible fortalecer todos estos mecanismos de definición de candidaturas en que se escucha la voz de la gente”.
Era, finalmente, un consuelo frente a los magros resultados de su colectividad en estas primarias. Ahora la DC se impuso en 28 primarias de las 65 realizadas. El PS en 16, el PR en 13, el PPD en 10, el PRO en 3 y Ciudadanos en ninguna.
Si bien el PS se posicionó como la segunda fuerza de la Unidad Constituyente, logrando imponerse con 17 de los 49 candidatos que inscribieron, dolió la pérdida de comunas como Pudahuel, donde triunfo la candidata del PRO Mónica Sánchez y no Jaime Romero, la carta de continuidad con que el PS buscaba reemplazar al histórico Johnny Carrasco.
Otro dato de los nuevos tiempos y que las colectividades políticas deben estar mirando con atención, es lo sucedido en Providencia, donde aún no se sabe si Evelyn Matthei será o no candidata presidencial de la UDI. En esta comuna la independiente, Verónica Pardo, será la candidata de la oposición para enfrentar a la actual alcaldesa. Se trata de una dirigenta vecinal, ingeniera comercial de profesión, apoyada por la Asamblea Territorial El Aguilucho y residente de Providencia desde hace 26 años.
Verónica Pardo se acercó a la política en medio del estallido social del 18 de octubre. Su interés por la alcaldía de Providencia surgió luego de que en medio de un cacerolazo se conociera con un grupo de vecinos, con los que iniciaron rondas de conversaciones, gestándose luego la Asamblea el Aguilucho. Su intención es generar un «Municipio Ciudadano», con foco en la democracia, DD.HH, diversidad y género, medio ambiente y sustentabilidad, cultura, desarrollo social, entre otros.
La elegida se impuso por 650 votos en estas primarias ciudadanas, casi el doble que el democratacristiano Pablo Jaeger, al actual concejal por la comuna; el periodista Felipe Parada (Comunes) respaldado por el Frente Amplio; el ingeniero Carlos Aránguiz (PS); Jorge Sanhueza (PR) y el militante del PC, Luis Ibacache.
El PPD se impuso en 10 comunas en total y participó en 34 primarias, mientras que los radicales solo formaron parte en 32 desplazando al PPD como la tercera fuerza electoral en estos comicios. Contentos y sorprendidos estaban los radicales, señalando que su triunfo mostraba una “vitalidad política y electoral” de la colectividad, asegurando que esto les daba más piso para enfrentar los próximos desafíos electorales.
En el PPD destacaron triunfos en capitales regionales como Chillán, así como en comunas relevantes como Buin y afirmaron que las 10 comunas en que ganaron representaban lugares en los que la centroizquierda tendría “buenas posibilidades” para las elecciones del 11 de abril.
¡Partieron!
El 21 de diciembre, un día después de salir a regañadientes de su cargo en el BancoEstado, Sebastián Sichel anunció que era candidato presidencial como independiente, apoyado por la coalición de derecha, Chile Vamos. Así, otro candidato de ese sector salta al ruedo, apurado por la salida de Mario Desbordes del Ministerio de Defensa luego de apenas 6 meses en el cargo. Lo mismo que Sichel en BancoEstado. Se suma así a Joaquín Lavín y Evelyn Matthei, de la UDI; a Desbordes por RN, si es que no entran otros a la palestra en ese partido; y se está a la espera de la decisión de Felipe Kast, por Evopoli.
Respecto a la decisión de Desbordes, Luis Larraín, de Libertad y Desarrollo tiene claro el panorama: “El ex presidente de RN -dice- está en su derecho al explorar una candidatura presidencial, más allá de las palabras de buena crianza que hasta ahora le hacían decir que su prioridad era desempeñar su cargo en el gabinete de Piñera. La política, como el mercado, puede ser cruel y lo que ha ocurrido es una muestra más de la pérdida de poder de Sebastián Piñera”.
“El próximo 11 de enero se inscriben los candidatos para la Convención Constitucional, cuya elección se realizará el 11 de abril. Lo mismo ocurre con los candidatos a alcaldes, concejales y gobernadores regionales. Vistas las dificultades que ha tenido la centroizquierda para enfrentar unida estos comicios, por la insistencia del Partido Comunista y sus aliados en el Frente Amplio de “matar al padre” y sepultar a la izquierda tradicional, la derecha tiene una oportunidad para recuperar algo del terreno perdido a partir del 18 de octubre de 2019 si es que enfrenta unida las elecciones que vienen”.
Y ese es el mensaje que se repite en la derecha. La oportunidad que les está ofreciendo la diáspora de la centroizquierda.
Si bien ya se pronunciaron todos los partidos del conglomerado de derecha aceptando la participación de Sichel como independiente, hay alertas en algunos de ellos. Por ejemplo, en Evopoli señalan en privado que, si Sichel quiere ir a la primaria, debería ser presentado por RN, ya que son parlamentarios de ese partido quienes lo promueven como carta presidencial.
En todo caso, en el gremialismo será uno de los dos candidatos el que irá a la primaria del sector, porque le temen a la dispersión de votos, tanto como en RN temen un supuesto favoritismo de La Moneda por Sichel. Esto, porque fue el propio Piñera quien le planteó a los dirigentes de la UDI, RN, Evopoli y el PRI en que deben existir comicios previos amplios, incluyendo al expresidente de BancoEstado.
Respecto a José Antonio Kast, en Chile Vamos tienen claro que no les aporta mayormente, por lo que desechan la posibilidad de aceptarlo en sus primarias. Hasta ahora.
