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A menos de un par de semanas de iniciadas las clases escolares por el Mineduc, la Red de Docentes Feministas ha denunciado el uso de material sexista en los textos entregados por el Ministerio de Educación y Junaeb.
La omisión de un lenguaje verdaderamente inclusivo y la entrega de materiales de apoyo como cuadernos con ilustraciones que señalan situaciones de vulneración hacia las mujeres, son denuncias que se repiten cada año, dando cuenta de la urgencia de abordar el sexismo en la educación, sobre todo en la inicial.
Urgen transformaciones
Las denuncias realizadas por la Red de Docentes Feministas abordan textos escolares y materiales entregados a niñas y niños en la primera infancia, es decir, primero y segundo básico. “No basta con advertencias o notas al pie, urgen transformaciones pedagógicas y teóricas en el tema”, declararon desde la agrupación.
La nota al pie en los textos escolares, a la que se hace referencia, señala “En este libro se utilizan de manera inclusiva términos como “los niños”, “los padres”, “los hijos”, “los apoderados”, “los profesores” y otros que se refieren a hombres y mujeres.
El sexismo en la educación es un tema que ha sido visibilizado desde hace muchos años por las organizaciones feministas. Hace unos días, en el marco de la conmemoración del 8 de Marzo, la Red Chilena Contra la Violencia Hacia las Mujeres lanzó un cuadernillo ilustrado titulado “Experiencia Educativas durante el 8M. Actividades y reflexiones no sexistas de y para trabajadoras de la educación”, proyecto elaborado tras una serie de encuentros de trabajadoras de la educación.
El trabajo se sumó a publicaciones de la Red Chilena de años anteriores, tales como “Educación No Sexista. Hacia una real transformación” y “Sexismo en la Educación”.
Textos desvirtúan el concepto “inclusivo”
Rosario Olivares, integrante de la Red de Docentes Feministas, señaló tras lo denunciado que “Desde el movimiento por una educación no sexista, venimos planteando la necesidad urgente de una educación libre de estereotipos y sesgos de género. La nota al pie que aparece este año en los libros de estudios nos parece una medida menos que cosmética, porque desvirtúa el concepto de “inclusivo”, al señalar que cuando dice padres, niños o profesores, en verdad está diciendo niñas y niños, o padres y madres. Tal conceptualización, desde nuestro punto de vista está equivocada”.
Explica que el dar a entender que cuando se habla de niños, también se refiere a niñas, nuevamente “la invisibilización que tanto nos ha perjudicado”.
Si bien el Ministerio de Educación fue emplazado por redes sociales a referirse al tema, hasta el momento no ha existido ninguna respuesta, ni tampoco se han sacado los textos y materiales de apoyo de distribución.
Para Rosario Olivares el uso de lenguaje inclusivo se considera “fundamental, para tener una educación que avance en la visibilización de todes; que hombres, mujeres y la diversidad de identidades sexo-genérica sean nombradas, más allá de una nota al pie, porque esto sin duda los dota de existencia y por ende de identificación. Hablar solo desde el masculino lo único que ha logrado es que más de la mitad de la población no se siente protagonista de su aprendizaje”.
