El Presidente Boric dio un golpe a la cátedra -política y económica- al anunciar la Política Nacional del Litio hace algunos días, qué duda cabe. Afuera, los medios hablaron de “nacionalización” de la citada industria. La caída de las acciones de SQM, arrastrando a la Bolsa de Comercio a sus peores jornadas en un semestre, puso nerviosos a más de alguno.
Lo cierto es que claramente este es un Gobierno, que en buena hora, se la está jugando por tener nuevos ingresos que le permitan, en definitiva, apuntar a un nuevo “pacto social” para atender las demandas sociales que están allí…a la vuelta de la esquina. De allí la insistencia en el éxito de la reforma tributaria, las modificaciones al royalty minero, y ahora, el nuevo marco de trabajo para avanzar en la industria del litio, que por cierto, representa la posibilidad de importantes recursos para el Estado. Es demasiado evidente, para analistas externos e internos – y hasta lo ha dicho el FMI y el Banco Mundial-, que Chile no podrá avanzar hacia un “Estado de Bienestar” como el que se estima necesario, sin contar con los ingresos fiscales adecuados y teniendo una de las cargas tributarias más bajas, en relación al PIB, de los países de la OCDE.
En ese marco este anuncio sobre cómo explotar y aprovechar los recursos del litio, resultaba clave. En rigor, no cabría hablar de nacionalización, porque por un lado se dijo claramente que se respetarían los contratos vigentes, lo que hace la diferencia con un proceso de ese tipo. Por otro, se habló de que el Estado tendría una posición controladora y los gremios empresariales, acostumbrados a oponerse a todo lo que implique restarles un negocio rentable, pusieron el grito en el cielo criticando ese planteamiento.
Posteriormente el Ministro de Hacienda, Mario Marcel, acostumbrado a estas aguas turbulentas, sostuvo que no necesariamente la política anunciada implicaba un Estado controlador “en todos los proyectos de litio”. Habló de los estratégicos. En otras palabras en algunos proyectos podría no serlo.
A los entendidos en minería y en este mundo de grandes inversiones, donde los temas tecnológicos y las exigencia de competencia por costos son pan de todos los días, estos planteamientos les recordó la discusión aquella, cuando Codelco sin dejar de ser estatal, dejó el gran yacimiento de El Abra con un 51% de control privado y hoy reporta importantes ganancias para la estatal.
Minera El Abra, hoy filial de Freeport-McMoRan (FCX), es una faena minera de cobre a rajo abierto al noreste de Calama, cuya principal actividad es la producción de cátodos de cobre, y “comparte la participación de las acciones con la Corporación Nacional del Cobre de Chile, Codelco, siendo un 51% propiedad de FCX y el 49% restante correspondiente a Codelco”, reza su página web. Incluso la operación ha tenido cambios de propiedad privada porque esto partió con la empresa Cyprus (1993) con el 51% de la propiedad, y el 49% restante perteneciente a Codelco. “En noviembre de 1999 Phelps Dodge Corporation adquiere a Cyprus, para finalmente en marzo de 2007 Phelps Dodge ser adquirida por FCX”, se indica, lo que da cuenta del fuerte dinamismo del mercado minero.
Sergio Bitar, quien fue ministro de esa área en el gobierno de Salvador Allende, también ministro de Estado de Ricardo Lagos y Michelle Bachelet, además de senador por 8 años por Tarapacá, tiene experiencia de sobra en el tema. Algunos incluso lo candidateaban en su momento para Presidente. Hoy está dedicado a full, entre sus múltiples actividades, a ser candidato al Consejo Constitucional por la Región de Tarapacá.
Nuevo tipo de relación público-privada
Este ingeniero, doctorado en Harvard, también conocido por sus experiencias de recluido en Isla Dawson y posteriormente exiliado, tiene una visión pragmática sobre el particular. Considera que lo anunciado por Boric “en general me parece bien”, no obstante observa que en el trámite parlamentario hay espacio para “formulas inteligentes” que permitan sacar el máximo provecho a este recurso de todos los chilenos.
-Se lo pregunto de entrada ¿Por qué la Empresa Nacional del Litio no puede ser derechamente estatal, como nació Codelco? ¿Por qué antes si y hoy no?
-Porque el mundo ha cambiado mucho, los estados no están en condiciones de ser estados productores, además hay tratados internacionales en que no se puede estar subsidiando productos. Por ejemplo, hasta los chinos les indican a sus empresas que tiene que ser competitivas, saber competir, en costos, tecnología, innovación, contra multinacionales de todo el mundo. Hoy existe una nueva forma de concebir una alianza, donde ya no es Estado versus mercado, sino que se debe combinar inteligentemente la capacidad de gestión y los avances tecnológicos, como aportes privados, con la conducción más estratégica y la generación de capacidades humanas que puede aportar el Estado.
–El modelo en asociación con privados, en una empresa de control estatal, ¿convencerá a los privados una participación así para invertir?
-En primer lugar, nada está definido, la nueva Empresa Nacional del Litio debe aprobarla el Parlamento, y no está garantizado que se apruebe, en la negociación que tendrá que haber ese es un punto para conversar. Y también, según la Constitución ningún privado puede explotar minerales, salvo aquellos en manos de la Corfo, antes de la Constitución de la 80, entonces al propio sector privado le puede interesar ampliar las posibilidades de negocios. La idea general a mí me parece bien, que el Estado esté presente, no sólo para producir, sino para formar capacidad nacional, productos nuevos. Se debe buscar una fórmula inteligente que permita sacar el máximo provecho de estos recursos.
-Pero si uno mira la experiencia del cobre, no hemos avanzado mucho en generación de valor agregado, y también se creó un instituto de investigación (como se anuncia ahora) el CIMM, pero seguimos exportando básicamente materias primas…
-Algo se ha avanzado el cobre, con los procesos de lixiviación, en la producción de cátodos. Si el país se lo toma en serio, tiene que desarrollar capacidades nacionales. Llegar a contar con un centro de formación de expertos en esta materia, con capacidades para negociar con otros países, etc.
-Con SQM el tema no se ve fácil, a ellos les vence su contrato en 2030 en el Salar de Atacama y qué interés podrían tener en negociar participación en el negocio…
-Hace mucho tiempo existieron conversaciones para poder extender el periodo, y dentro de las empresas privadas y SQM, estuvieron disponibles para un acuerdo con el Estado, donde éste tenga una participación relevante, pero la administración esté en manos de personas capaces de hacerlo bien, que conozca los mercados, los productos y la competencia. Al final va a haber una negociación entre el Estado y la empresa, hay que abrirse a nuevo tipo de relación público y privada, y buscar ese equilibrio virtuoso donde la administración y el desarrollo tecnológico estén adecuadamente abordados.
-Empresas tan poderosas como la finlandesa Outokumpu, tenía hasta principio de los 90 casi un 60% de participación estatal, por citar una y se han desarrollado fuertemente en todo el mundo…
– Claro, ha tenido una presencia estatal fuerte, pero también privada porque justamente se requiere competir a nivel mundial, en las grandes ligas globales, y los países muy desarrollados y con economías fuertes, saben que ello requiere de alianzas público-privadas potentes que sean capaces de aquello.
Codelco necesita empresa para el litio
– Hay quienes han planteado que los ingresos del litio podrían hacer innecesaria o postergable una reforma tributaria como la que se está tramitando en el Congreso e incluso lo vinculan a los nuevos recursos del royalty…
– Es un error garrafal plantear eso, porque no se puede depender de las oscilaciones de un producto. El desarrollo social del país requiere de recursos estables y eso no puede estar correlacionado con los precios de un producto determinado que ha estado a 20 dólares, después a 80 y posteriormente volviendo a 15 o 27 dólares. Una reforma tributaria representa nuevos recursos en serio para un nuevo pacto social. No puedo eludir una reforma tributaria, porque en un momento un determinado producto generó aportes al Fisco por US$5.000 millones, pero no sabemos si después los generará…requiere de ingresos absolutamente estables.
– ¿Alcanzaremos a aprovechar los buenos precios del litio?, se duda de eso, porque la tramitación de la Empresa Nacional del Litio va a demorar en el Congreso. No obstante Codelco y Enami pueden desarrollar negocios desde ya…
– Claro, eso nos ayuda a no dejarlo abandonado a lo que hagan algunas empresas. No obstante, tenemos que ver si Codelco, y Enami, conociendo las tareas enormes que tienen, la primera con enormes exportaciones de cobre… puede hacerlo. Codelco tiene que armar una empresa distinta, con foco exclusivo en el litio y asociarse para ello con privados. Enami, por su parte también tiene tareas importantes, como ampliar su capacidad de fundición, con una nueva planta de fundición, en Mejillones, o más al sur, para fundir mediana minería, son empresas importantes y de alta excelencia, pero que tienen grandes compromisos y habrá que ver las mejores fórmulas al respecto.
