Maipú, Santiago, Ñuñoa, Til Til, Viña del Mar, entre muchos otros, son las comunas que cuentan con un alto déficit económico que dejó el paso de ex ediles de Chile Vamos.
En el caso de Maipú, las nuevas autoridades denunciaron el mal desempeño de la ex alcaldesa Katy Barriga por una deuda de 43 mil millones de pesos. El actual alcalde, Tomás Vodanovic, sostuvo que su comuna está quebrada y que no hay dinero para pagar los sueldos de los empleados municipales. A lo anterior, se suma una cuantiosa deuda con la empresa Enel. También los concejales de Maipú denunciaron el hallazgo de bodegas con productos que nunca fueron entregados a los vecinos, como peluches y casi 20 mil kit de RCP vencidos en octubre de 2020 cuando la pandemia en esa comuna arrasaba.
Algo parecido se encontró el edil de Ti Til, Luis Valenzuela, quien se encontró con facturas impagas y una gran deuda con los profesionales de la educación los que se niegan a volver a clases hasta que se les cancelen sus honorarios. “No tenemos cómo hacerlo, porque el municipio fue dejado con un déficit económico enorme”, manifestó Valenzuela.
La mala gestión de los y las alcaldes de Chile Vamos también se hizo evidente en la Municipalidad de Santiago. La alcaldesa Irací Hassler contó que el municipio posee un gran déficit en Educación, agregando que se encontró en una bodega más de mil computadores que nunca fueron entregados a los y las estudiantes para seguir sus clases telemáticamente.
Emilia Ríos, la alcaldesa de Ñuñoa, informó de un déficit de más de mil 700 millones de pesos en su municipio y responsabilizó de esta deuda a la Corporación Municipal.
Otro hecho que tuvo connotación pública fue el fallo del Tricel de Viña del Mar que destituyó a la ex alcaldesa Virginia Reginato por “abandono de deberes” y la dejó sin poder ejercer cargos públicos por los próximos 5 años, pero sin un día de cárcel. El municipio viñamarino también cuenta con uno de los más altos déficit económicos de todo el país. Reginato había resultado electa concejala con la más alta mayoría en las últimas elecciones del 15 y 16 de mayo de 2021.
Los y las nuevas alcaldesas anunciaron auditorías externas independientes para constatar el daño que se produjo de parte de los ex ediles y manifestaron que, de comprobarse irregularidades, interpondrán querellas judiciales contra los responsables.
Consultados los nuevos ediles sobre los altos déficit presupuestarios que presentan sus comunas, lo atribuyeron a la falta de control de los dineros que se manejan en los municipios. “Durante estos últimos años, muchos concejales hicieron denuncian a la Contraloría General de la República que, en muchos casos, evidenció irregularidades pero el ente contralor no tiene facultades propia para iniciar la destitución de la autoridad edilicia”, contó el alcalde Valenzuela.
Algo similar ocurre con las funciones de los y las concejalas que no tienen atribuciones para destituir a una autoridad municipal.
