Periodista.
El 24 de abril de 2013 el edificio de ocho pisos Rana Plaza colapsó en Bangladesh. Más de mil obreras de las empresas textiles que funcionaban en el lugar murieron por las condiciones de hacinamiento en que trabajaban.
La tragedia dejó en evidencia las inhumanas y precarias condiciones laborales en las que se encontraban miles de mujeres al interior de las fábricas de ropa pertenecientes a la industria de la moda, de empresas transnacionales como Benetton, Mango, Indetex y Primark, trabajadoras que recibían salarios miserables y cumplían con largas jornadas laborales.
Cada año, el movimiento feminista internacional conmemora el desastre de Rana Plaza en Bangladesh con el objetivo de mostrar la realidad en la que funcionan las empresas transnacionales y una industria basada en la explotación de mano de obra barata y vulnerable.
Para denunciar y mantener en la memoria este hecho, desde el año 2015, la Marcha Mundial de las Mujeres estableció el 24 de abril como día de solidaridad y acción global para visibilizar los efectos de las empresas transnacionales en la vida de las mujeres trabajadoras, “las mismas que acumulan más recursos que muchos países, a costa de la vida de las personas y la destrucción de la naturaleza”, señala este movimiento mundial de acciones feministas que reúne grupos de mujeres y organizaciones que actúan para eliminar las causas que originan la pobreza y la violencia contra las mujeres.
Conmemoración en Chile
En el país, la Marcha Mundial de las Mujeres en Chile, invita en esta fecha a reflexionar sobre el efecto de este modelo económico en la vida de las mujeres. Para ello presentó la antología “Saberes y prácticas sobre economía feminista y otras economías. Una mirada a través de los años”, con textos recopilados de las más de 15 ediciones en los nueve años de edición de la “Revista Ceres: Creando Feminismos” y que está disponible para su descarga en la web www.marchamujereschile.cl
En la recopilación de artículos se abordan temas como los efectos de la división sexual del trabajo, el aporte de las mujeres a los cuidados, y la sobreexplotación de las mujeres, lo que derivó en lo que actualmente se denomina Economía Feminista. “Estas reflexiones apuestan por otro tipo de economías, en donde el centro está en la vida y no en el mercado, haciendo una fuerte crítica al sistema capitalista, racista, (neo) colonialista y patriarcal”, dice la Marcha Mundial de las Mujeres en Chile.
Ciclo de charlas
En el marco de la acción internacional por los efectos de las transnacionales en la vida de las mujeres y la actual crisis financiera-sanitaria, la Marcha Mundial de las Mujeres en Chile realizará además una serie de charlas denominadas “Semillero de alternativas feministas por el buen vivir”.
Serán tres sesiones los días martes, que parte el 28 de abril con “Nociones de economía feminista”, para continuar el 5 de mayo con la charla “Mujeres y trabajos” y finalizar el 12 de mayo con “Experiencias territoriales de economía feminista y solidaria”.
En la primera sesión participarán las destacadas feministas Cristina Carrasco, doctora en economía con vasta trayectoria en economía feminista y Miriam Nobre, brasileña con destacada experiencia en acompañamiento a campesinas/os y pueblos indígenas en temas de agroecología, soberanía alimentaria y economía feminista.
La transmisión se puede seguir a través de Facebook live Marcha Mujeres Chile @marchamujeres a partir de las 19:00horas.
