Periodista y Director de Página 19.
Alguien, en el mismo centro del poder del Palacio de La Moneda, se permitió bromear diciendo que en medio del Patio de Los Cañones, ya estaba instalada una guillotina que se usaría nada menos que en la primera mujer Ministra del Interior: Izkia Siches.
Puede leerse como una mera exageración, pero basta solo con mirar a los medios que ayer eran oficialistas y que hoy son de oposición para ver (leer) cómo la trataron. Solo un ejemplo, el diario La Tercera, abiertamente de derecha, le dedicó 9 páginas del periódico para hacerla trizas. El Mercurio, La Segunda y Las Ultimas Noticias hicieron lo suyo. Para qué decir los matinales y noticiarios de la televisión abierta que también colaboraron en esta “tarea informativa”. Incluso CCN Chile que anda por la vida señalando que es un medio “independiente” resucitó a los recién expulsados de la administración Piñera para darle como dijo un señor por ahí “como bombo en fiesta”.
Es cierto que la Secretaria de Estado no tuvo la mejor perfomance en la Comisión de Seguridad de la Cámara de Diputadas y Diputados, como si ellos mismos y otros no se hayan mandado un numerito en su propia historia. Basta solo recordar, a modo de ejemplo, al senador UDi, Iván Moreira, con su “raspado de la olla”. En fin….estaríamos durante muchos días, meses y años citando frases de los honorables que, por lo demás, nunca se disculparon y menos se pusieron colorados.
Más allá de lo anterior, también es dable que a la Ministra Siches le falta algo de oficio político. Quizá, tan solo quizá, no debió rodearse de su mismo equipo de trabajo de cuando era Presidenta del Colegio Médico. Quizá, tan solo quizá, debió hacer un mix combinando un equipo de su suma confianza con uno más político que le entregara las herramientas que necesita su cargo, porque además no es fácil ostentar una investidura de esa naturaleza cuando se declara independiente. Eso fue más que evidente. La mudez de la alianza, Apruebo Dignidad, que la llevó a Palacio fue más que evidente, salvo por senadores y diputados del Partido Socialista que la terminaron defendiendo de los medios hegemónicos y tradicionales, porque la misma derecha ni siquiera sabía qué hacer en las primeras horas del conflicto. Pero, lo que es más evidente es que le faltan asesores y especialistas en temas de su cartera que tengan experiencia política y de gobierno.
Algo de machismo también hay en toda esta historia. A la élite política le cuesta relacionarse con una mujer con don de mando y de seguro, trataran por todos los medios de hacerla caer. Siches, una mujer inteligente, debería empoderarse mucho más demostrando que puede hacer bien las cosas con resultados concretos y olvidándose de la estrategia comunicacional que ocupó cuando fue Presidenta del Colegio Médico, pues ya no le sirve.
Y, en este nuevo escenario, también la quieren dejar sin voz, encerrada en los muros de su oficina del Palacio de Toesca. Para muestra un botón: Juan Sutil, el presidente de los empresarios, se reunió con ella hace unas horas y en un punto de prensa aconsejó a Siches a guardar silencio y usar un mejor lenguaje. Basta con mirar su twitter para señalar que este personaje tiene poblada la herramienta del pajarito azul con mensajes machistas y discriminatorios.
En esta tarea, la Ministra del Interior Izkia Siches tiene una gran labor por delante, incluso más allá de su género, sino también de empoderarse como la segunda figura más relevante de la Nación. Todo depende de ella…
