El Día Internacional de la Planificación Familiar se conmemora cada 3 de agosto, tanto en Chile como en el mundo, para reconocer la importancia de esta temática como parte de los Derechos Humanos fundamentales.
A pesar de que hace más de 50 años los Estados se comprometieron en Naciones Unidas a avanzar hacia la garantía de este derecho, en la actualidad existen riesgos considerables de retroceder en la materia, por la falta de educación, acceso, falta de disponibilidad y falla de métodos anticonceptivos.
APROFA, organización que emerge en Chile a propósito de la articulación de especialistas que buscaban aportar a la política pública en relación a la planificación familiar, mencionan que la conmemoración de esta fecha “apunta a recordar la importancia de que exista acceso igualitario a la información y métodos anticonceptivos, así como fomentar la agencia de las personas para tomar decisiones informadas respecto a la planificación de su futuro reproductivo”.
“La falta de Educación Integral de la Sexualidad tiene como consecuencia, entre otras, que las personas no tengan real conocimiento sobre planificación familiar, entendida esta como Derecho Humano, y así haya aún desconocimiento sobre que es posible determinar libremente el número de hijos/as, los intervalos entre los nacimientos, en qué momento de la vida tenerlos o decidir libremente si no se quiere tenerlos”, indicaron.
Cifras en Chile
El informe sobre “Derechos Sexuales y Reproductivos” publicado por Corporación Miles, informó que entre el 2020 y 2022, más de 350 mujeres resultaron embarazadas debido a las masivas fallas de anticonceptivos en Chile.
Débora Solís, directora ejecutiva de APROFA, enfatizó en que “los Estados deben resguardar a las mujeres cuyos derechos fueron vulnerados debido a embarazos no planificados por pastillas defectuosas e implementar políticas públicas para prevenir futuros casos”.
Para Solís, la importancia de la planificación familiar radica en que ofrece a las personas el control sobre su propia salud sexual y reproductiva. “Al brindar opciones para elegir, se les otorga autonomía para tomar decisiones informadas sobre su futuro y bienestar y las fallas se transforman en una burla para aquellas que invirtiendo en su planificación no se les garantiza su efectividad”, añadió.
Brecha de género en los anticonceptivos
Píldoras, parches, dispositivos intrauterinos, inyecciones y anillos anticonceptivos. Estos son algunos de los productos que existen para que personas con la capacidad de gestar puedan tener la posibilidad de decidir sobre su salud reproductiva. Desde APROFA plantean la interrogante de por qué esta variedad de opciones no se replica para personas con pene, dado que actualmente solo están las opciones del preservativo y la vasectomía.
“La problemática de que no exista en este momento muchas alternativas anticonceptivas para personas con pene es producto de una brecha de género, ya que se ha asignado una carga a las personas que tienen la capacidad de gestar”, explica la organización.
