A casi una semana de las elecciones presidenciales y parlamentarias, un sector del Partido Comunista de Chile emitió una declaración respaldando al régimen de Daniel Ortega. Sin embargo, el diputado y candidato de Apruebo Dignidad, Gabriel Boric, condenó la falta de transparencia en el país centroamericano y las calificó de “fraudulentas” y llamó al PC a rectificar sus dichos.
Cabe recordar que el gobierno nicaraguense, en los últimos meses, detuvo a gran parte de los candidatos a las elecciones, no permitió la presencia de veedores del proceso y hizo un férreo control de los medios de comunicación. Al final, Daniel Ortega informó que ganó su cuarto período consecutivo con 70 por ciento de los sufragios.
Entretanto, varias personalidades del Partido Comunista de Chile dijeron desconocer el origen de la declaración de apoyo al resultado de las elecciones en Nicaragua. La Diputada Camila Vallejo señaló en un twitter que “ Esta declaración no fue discutida ni resuelta por la dirección colectiva del partido. Condenamos las violaciones a los DD.HH en Nicaragua, Chile y en cualquier parte del mundo. Gabriel Boric será nuestro pdte y él será quien defina la política exterior del Gob de Apruebo Dignidad”.
Por su parte, la diputada Karol Cariola manifestó también en redes sociales que “Ante la polémica sobre declaración de Nicaragua, no la conocía y personalmente no la adhiero. Tengo la convicción que Gabriel Boric, como futuro presidente tiene en sus manos la responsabilidad de llevar las relaciones internacionales del país y lo respaldaremos en ello”.
También la militante del PC y Convencional Bárbara Sepúlveda dio su opinión en twitter: “ La declaración sobre Nicaragua no fue producto de la discusión del colectivo PC y tampoco me representa. Las feministas sabemos de la persecución política de Ortega en contra de nuestras compañeras. Lo de Nicaragua es inaceptable e indefendible”.
Además, las Juventudes Comunistas en un comunicado respaldaron las afirmaciones de las diputadas. Todo indica, a juicio de los militantes más jóvenes del Partido Comunista, es que existe un problema generacional en su interior, porque no se sienten representados y representadas con regímenes autoritarios y que violan los derechos humanos, como el de Nicaragua.
