Convocado por Unidad Social, este 21 de agosto se llevó a cabo un Punto de Prensa virtual para denunciar públicamente las múltiples dificultades que han sufrido miles de personas migrantes y chilenos residentes en el exterior para acceder al cobro del 10% de sus fondos previsionales en sus respectivas AFP.
Según denunciaron Víctor Hugo Sáez, de la Red Europea de Chilenos en el Exterior, y Héctor Pujol de la Coordinadora Nacional de Migrantes, tanto en el extranjero como en Chile, las AFPs han rechazado las postulaciones por diversas causales tales como la carencia de una cédula de identidad vigente o dificultades para verificar cuentas bancarias personales.
En el caso de las y los chilenos en el exterior, las AFP han orientado que la tramitación se haga a través de los consulados en los países de residencia para posteriormente concretar presencialmente el trámite en la respectiva AFP en Chile a través de algún familiar, con todas las dificultades y riesgo que supone, además del retraso importante en la concreción del traspaso de los recursos para personas a quienes les urge recibir dichos fondos para enfrentar los complejos problemas que conlleva residir en el exterior y sin posibilidad de retornar a su país.
La población migrante tampoco han podido acceder al retiro de sus fondos producto de su situación migratoria irregular, condición que les ha significado vivir graves dificultades para sobrevivir junto a sus grupos familiares.
En opinión de Carolina Espinoza, Vocera Nacional de la CNT NO+AFP, estas graves irregularidades se suman a las sufridas por miles de chilenas y chilenos que por distintas causales no han podido acceder a retirar el 10% de sus fondos, tal cual ha sido ampliamente denunciado a través de los medios de comunicación formales y de las redes sociales.
Según la vocera de la CNT NO+AFP, urge que las autoridades tomen las medidas requeridas para que los problemas se resuelvan a la brevedad en beneficio de las y los millones que se movilizaron en el país para forzar la aprobación de la reforma constitucional que facultó el retiro del 10% de los fondos en las AFP, terminando por doblegar a los sectores opositores a dicha propuesta, sectores que una vez aprobada la reforma, no trepidaron en modificar radicalmente su discurso fatalista previo, erigiéndose en benefactores de la ciudadanía.
“La industria AFP además de ser un sistema absolutamente fracasado para efectos de entregar seguridad social, hoy -y pese a registrar utilidades que solo en el primer semestre de este año ascienden a más de 180 mil millones- ha sido ineficiente en el cumplimiento de la ley que establece la entrega del 10% del ahorro previsional, situación especialmente grave para los sectores más vulnerables en esta contingencia de crisis sanitaria y económica social”, manifestó.
