Periodista.
Advertencias que semejaban amenazas y un cierto tufillo a chantaje. Es lo que sintieron y hasta olieron muchos de los actores políticos, particularmente de la derecha, cuando aún no habían pasado 24 horas desde que se habían inscrito los candidatos a la Convención Constituyente el pasado 11 de enero.
Es que la aparición de un nombre -Tere Marinovic- presentada a última hora por José Antonio Kast en la lista de independientes, nada menos que de Renovación Nacional, hizo encender luces rojas en todo el conglomerado de la derecha, en distintos grados sí: para RN fue un verdadero misil cuyas esquirlas siguen provocando heridos. Para Evopoli, desagrado e incomodidad y de nuevo tragarse lo que le impusieron. ¿Para la UDI?, no mucho, solo la molestia de gastar energía en arreglar el desorden en que quedó lo que parecía ser su gran triunfo: la lista única para enfrentar la Convención Constitucional.
Tere Marinovic es conocida en algunos círculos como una columnista esencialmente provocadora, contraria al aborto, al matrimonio entre personas del mismo sexo y a la adopción de niños por parte de esas parejas. Se trata de una mujer de mediana edad, con nueve hijos, que estudió cinco años de Filosofía en la Universidad de Los Andes y dicen que fue profesora en las Cátedras de Antropología Filosófica, Teoría de la Verdad y Teología. Actualmente es Directora Ejecutiva de la Fundación Nueva Mente, un emprendimiento de su autoría.
Algunas de sus perlas
Algunas de sus frases que producen urticarias hasta en su propio sector aparecen en sus columnas. La fiscal Chong es china, igual que el virus”, dijo en una oportunidad, sumándose así a quienes la critican, como el ex ministro del Interior, Víctor Pérez, o quienes le dejaron una carta amenazando a ella y su familia, por -entre otras causas- la formalización de Sebastián Zamora, ahora ex carabinero, acusado de empujar a un adolescente de 16 años desde el Puente Pío Nono durante una manifestación. De hecho, en otra ocasión escribió: «Cómo sigue el estado de salud del joven que practicaba natación en el Mapocho el día de ayer», generando una ola de críticas.
«Un ministerio para los temas de la mujer es ridículo», dijo en otra oportunidad. Y ahí deja claro su real pensamiento: “Creo que la mujer no necesita, para hacer valer su dignidad, estar diferenciándose constantemente y haciendo valer privilegios. Cuando se habla de paridad es eso, que te dejen entrar por la puerta del lado. Yo soy más feminista, pero de manera inteligente, que es exhibir méritos, lo otro me parece indigno, patético”.
Para Marinovic “ser homosexual no es una opción: es una anomalía. El tema homosexual para mí es irrelevante -sé que suena brutal- pero quiero decir que es secundario dentro de mis intereses”…” ¿Qué me importa? El derecho a disenso, el poder decir que ser homosexual es anómalo. Y ese derecho a disenso lo respeto para quienes dicen que los católicos son personas frustradas o como quieran. No creo conveniente dar en adopción niños a homosexuales”…
Consultada sobre las manifestaciones -cuando había- de jóvenes estudiantes, dijo que “¿Sobre los pendejos malcriados?, sí, pensé mucho usar el garabato, pero es que, de verdad, los estudiantes son niños, parte del problema. No entienden ni siquiera lo que leen y se arrogan el derecho de tomar decisiones en un tema crucial y la autoridad aparece subyugada. Acá un tema del que no se ha hablado es dónde están los papás de esos niños; si un hijo me dice que hará una toma, lo agarro de las mechas, no literal, y lo llamo al orden”.
Y respecto a la situación de los dueños de camiones cuyos vehículos son incendiados, señaló que había que “correr bala no más”.
Se autocalifica como “única”, porque “soy muy liberal en algunos aspectos y en otros, conservadora. El punto es qué entendemos por cada uno. Yo entiendo de manera única, porque nadie más lo entiende así, que ser conservador significa en esencia respetar la libertad como un bien absoluto…” De paso, aclara que no pertenece a algún grupo religioso y que no dispara “a mansalva” como la doctora Cordero.
Piden que renuncie
Lo expuesto son sólo algunas perlas de Marinovic que, se resiste a dar un paso al costado, pese al terremoto que su presencia provocó. Es que la defensa de su jefe ha sido a todo evento, hasta ahora. El presidente del Partido Republicano afirmó que «de ninguna manera» bajarán su candidatura. Apenas se supo de las críticas, Kast posteó: “Santiago, Providencia, La Granja, Macul, Ñuñoa y San Joaquín tienen una gran candidata para la Convención Constituyente: Teresa Marinovic será nuestra representante en el pacto Vamos por Chile. ¡Una gran defensora de la libertad! A ganar @tere_marinovic !
Y mientras los republicanos blindaban a Marinovic, se incendiaba la pradera en Chile Vamos. El pre candidato presidencial de RN, Mario Desbordes, aseguró que “la señora Marinovic nunca estuvo en la lista, y de haber estado, no habríamos dado el ok. Inaceptable faltar a los acuerdos entre gallos y media noche».
Es que poco antes, se conoció que la Comisión Política de RN se había autoconvocado emitiendo una declaración pidiendo que los republicanos retiraran la candidatura de la directora ejecutiva de la Fundación Nueva Mente. No solo eso, pidieron también que la Directiva Nacional se hiciera cargo del «deficiente» proceso de negociación en las elecciones municipales y constituyentes. «Pedimos que se efectúen cambios urgentes en la Mesa Nacional que refuercen en lo político, administrativo y político las debilidades que ha demostrado en el proceso de negociación la actual directiva», dijo el comunicado.
Para el presidente de RN, cuestionado por la negociación que terminó con Marinovic en su lista, “no es algo que nos agrade. No es por la persona, sino que más bien la forma en que se hizo, porque si lo tenían oculto significa que actuaron de mala fe. Y es una de las cosas que uno tenía duda para integrar este pacto. Lo hicimos de buena fe, cumplimos con todos los requisitos, hablamos con la mesa, con la comisión política, se presentó al consejo general», comentó este miércoles.
Lo que viene
Cuando la doctora en filosofía, Silvia Eyzaguirre, única representante de quienes están detrás del también precandidato presidencial de la derecha, Sebastián Sichel, se enteró de con quién compartiría la lista por el distrito 10, anunció su renuncia. «Las condiciones que me llevaron a aceptar la oferta de RN para ir como independiente en un cupo de ellos, cambiaron de forma unilateral en el último minuto. De haber sabido las nuevas condiciones, no hubiera aceptado la oferta», se lee en la carta que Eyzaguirre envió al presidente de la colectividad, Rafael Prohens.
«No tiene que ver con Tere Marinovic, el veto les hace mal a las personas, sino que tiene que ver con las formas. Uno no debería enterarse de quién es tu compañero de lista la mañana siguiente», explicó a su vez Sichel.
Habrá que esperar qué ocurrirá, porque para que Eyzaguirre salga de la lista, se necesita la firma de los presidentes de Chile Vamos y también de Kast. Ella no puede solo renunciar. Si su candidatura fuera aceptada por el Servel el 21 de enero, aparecerá en la papeleta el 11 de abril próximo. Le guste o no.
Lo cierto es que la porfía de José Antonio Kast tiene a sus socios de pacto contra las cuerdas. Ya lo había señalado el presidente de Evopoli, diputado Andrés Molina: “Lo que se hizo ahí fue presionar al pacto en un momento en el cual no quedaba otra porque si no, el pacto se caía».
El jefe de bancada RN, Sebastián Torrealba, acusó a los republicanos de negociar con una “actitud ‘gansteril”. Y fue categórico: “En un próximo acuerdo electoral de Chile Vamos, Republicanos no va a estar, porque esta actitud destruye la confianza que se construyó durante meses de conversaciones. La verdad es que cuando se hace una vez, se hace muchas veces más”
En todo caso, todos están empeñados en poner paños fríos al desbarajuste. Francisco Chahuán, otro que se candidatea en RN, además de aclarar que RN no comparte las declaraciones que la mujer ha realizado en el pasado, señaló que «yo espero que hoy día, que ejerce un rol distinto, de candidata a convencional, entienda básicamente de que hoy día se requiere más que incendiar la pradera, más que atrincherarse ideológicamente, se requiere contribuir desde el espacio que da una elección de convencionales, para los efectos de poder difundir idea y principios y no descalificaciones». Y le trazó el camino para salir del atolladero: «Yo espero que Teresa Marinovic pueda hacer las aclaraciones correspondientes”.
Cristián Monckeberg (RN), trató de empatar señalando que, «los pactos normalmente tienen estas dificultades, uno mira también los de izquierda -no se trata de empatar- y también hay dificultades respecto de los nombres, de los candidatos, de las personas». Pero, prefirió destacar los esfuerzos desde Chile Vamos para “ir unidos” a la Convención Constitucional. Consultado si seguirá el pacto con el Partido Republicano, el exministro contestó: “Creo que no va a resultar, creo que hoy día la unidad es en torno a un proceso histórico para poder construir una Constitución, y donde se requiere bastante más altura y mirada de futuro que el ombligo y el metro cuadrado”.
Para el diputado Luciano Cruz Coke, lo ocurrido con Marinovic hace difícil la posibilidad de pactar a futuro con el partido de José Antonio Kast. “Se quiebran las confianzas (…) «Esto habla un poco también de la forma que tienen algunos de enfrentar la política y eso es lo lamentable. Usted me dice (que hubo) ingenuidad; mire, de aquí en adelante probablemente habrá que tener tres veces más cuidado con lo que uno pacta, porque se ve que las prácticas al final, luego de los pactos, son estas que estamos viendo”, dijo el parlamentario en una entrevista radial.
Para Kast, “centrarse en el detalle de lo que ocurrió esa noche, a mi juicio, no corresponde, porque tanto RN como la UDI y Evopoli tenía a sus representantes esa noche y cada uno se tiene que hacer responsable de lo que ocurrió”. Por lo tanto, Marinovic sigue en silencio, segura en su puesto. Por ahora, en RN reconocen que no hay demasiadas soluciones sobre la mesa, pues cualquier acción requeriría la aprobación de José Antonio Kast.
Aún quedan capítulos en esta historia. Y no es aventurado señalar que el pragmatismo se impondrá en la derecha, aunque hoy se diga que no habrá más pactos con los republicanos. Lo sabe Kast y lo sabe la UDI, quienes aseguran que “seremos premiados electoralmente”…
De todos modos, la pregunta sigue siendo si este pacto inicial del oficialismo sobrevivirá a la elección de convencionales.
